viernes, 2 de octubre de 2015

bobina de tesla

Una bobina de Tesla es un tipo de transformador resonante, llamado así en honor a su inventor, Nikola tesla, quien la patentó en 1891 a la edad de 35 años. La bobina de Tesla está compuesta por una serie de circuitos eléctrico  En realidad, Nikola Teacopladossla experimentó con una gran variedad de bobinas y configuraciones, de manera que es difícil describir un modo específico de construcción que satisfaga a aquellos que hablan sobre bobinas de Tesla. Las primeras bobinas y las bobinas posteriores varían en configuraciones y montajes. Generalmente las bobinas de Tesla crean descargas electricas con un alcance del orden de varios metros.

Transmisión

Una bobina Tesla grande de diseño actual puede operar con niveles de potencia con picos muy altos, hasta muchos megavolts (un millón de volts). Debe por tanto ser ajustada y operada cuidadosamente, no sólo por eficiencia y economía, sino también por seguridad. Si, debido a un ajuste inapropiado, el punto de máximo voltaje ocurre por debajo de la terminal, a lo largo de la bobina secundaria, una chispa de descarga puede dañar o destruir el cable de la bobina, sus soportes o incluso objetos cercanos.
Tesla experimentó con estas, y muchos otras, configuraciones de circuitos (ver derecha). El arrollamiento primario, el spark gap y el depósito condensador están conectados en serie. En cada circuito, el transformador de la alimentación AC carga el depósito condensador hasta que su voltaje es suficiente para producir la ruptura del spark gap. El gap se dispara, permitiendo al depósito condensador cargado descargarse en la bobina primaria. Una vez el gap se dispara, el comportamiento eléctrico de cada circuito es idéntico. Los experimentos han mostrado que ninguno de los circuitos ofrece ninguna ventaja de rendimiento sobre el otro.
Sin embargo, en el circuito típico (arriba), el cortocircuitar el spark gap previene que las oscilaciones de alta frecuencia 'vuelvan' al transformador. En el circuito alterno, oscilaciones de alta amplitud y alta frecuencia que aparecen a lo largo del condensador también son aplicadas a la bobina del transformador. Esto puede inducir descargas de corona entre los giros que debiliten y eventualmente destruyan el aislamiento del transformador. Constructores experimentados de bobinas Tesla utilizan casi exclusivamente el circuito superior, generalmente añadiendo filtros pasa baja (redes de resistencias y condensadores) entre el transformador y el explosor. Esto es especialmente importante cuando se usan transformadores con oscilaciones de alto voltaje frágiles, como transformadores de luces de Neon (NST en sus siglas en inglés). Independientemente de la configuración que se use, el transformador HV debe ser del tipo que auto-limita su corriente secundaria por medio de inductancias de fuga interna. Un transformador de alto voltaje normal (con baja inductancia de fuga) debe utilizar un limitador externo (a veces llamado ballast) para limitar la corriente. Los NST están diseñados para tener inductancia de fuga alta, para limitar sus cortocircuitos a niveles seguros.

miércoles, 19 de agosto de 2015

Estambul

es la mayor ciudad de Turquía y la ciudad más poblada de Europa. Fue sucesivamente capital de Estados soberanos como el Imperio romano, el Imperio romano de Oriente, el Imperio latino y el Imperio otomano hasta 1923.Es considerada por su espléndido valor artístico y su ubicación en el Bósforo como una de las ciudades mas bellas del mundo. Es una de las tres urbes transcontinentales que se sitúan entre Europa y Asia (las otras dos son Atyrau y Oremburgo).
Según las últimas estimaciones del Instituto de Estadísticas turco (2013) la población de esta megalópolis se ha incrementado hasta llegar a los 14 160 467 habitantes. La mayor parte de la población es de religión musulmana, si bien existen minorías de cristianos (68 000) y de judíos (22 000).
Es también la capital administrativa de la provincia de Estambul (de la que cubre 27 distritos)[1] en la llamada Rumelia o Tracia oriental. Fue denominada Bizancio hasta 330, y después Constantinopla.
El nombre de İstanbul, usado de forma no oficial desde hacía varios siglos en el país, fue oficializado el 28 de marzo de 1930 en sustitución de Constantinopla.
Aunque la capital política y administrativa es Ankara, Estambul sigue siendo una ciudad que tiene un papel fundamental en la industria, el comercio y la cultura de Turquía. Alberga más de una docena de universidades. Es sede del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla, cabeza de la Iglesia ortodoxa.
Fue sucesivamente capital de Estados soberanos como el Imperio romano, el Imperio romano de Oriente, el Imperio latino y el Imperio otomano hasta 1923. Con el final de la I Guerra Mundial y la derrota del Imperio otomano, el territorio europeo otomano quedó reducido a unas decenas de kilómetros en torno a Estambul. El 13 de octubre de 1923,[2] antes de la promulgación del estado turco sucesor, la República de Turquía, el parlamento turco legalizó la capitalidad a Ankara.
Las zonas históricas de Estambul fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1985, por sus importantes monumentos y restos históricos.[3]

estambul

es la mayor ciudad de Turquía y la ciudad más poblada de Europa. Fue sucesivamente capital de Estados soberanos como el Imperio romano, el Imperio romano de Oriente, el Imperio latino y el Imperio otomano hasta 1923.Es considerada por su espléndido valor artístico y su ubicación en el Bósforo como una de las ciudades mas bellas del mundo. Es una de las tres urbes transcontinentales que se sitúan entre Europa y Asia (las otras dos son Atyrau y Oremburgo).
Según las últimas estimaciones del Instituto de Estadísticas turco (2013) la población de esta megalópolis se ha incrementado hasta llegar a los 14 160 467 habitantes. La mayor parte de la población es de religión musulmana, si bien existen minorías de cristianos (68 000) y de judíos (22 000).
Es también la capital administrativa de la provincia de Estambul (de la que cubre 27 distritos)[1] en la llamada Rumelia o Tracia oriental. Fue denominada Bizancio hasta 330, y después Constantinopla.
El nombre de İstanbul, usado de forma no oficial desde hacía varios siglos en el país, fue oficializado el 28 de marzo de 1930 en sustitución de Constantinopla.
Aunque la capital política y administrativa es Ankara, Estambul sigue siendo una ciudad que tiene un papel fundamental en la industria, el comercio y la cultura de Turquía. Alberga más de una docena de universidades. Es sede del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla, cabeza de la Iglesia ortodoxa.
Fue sucesivamente capital de Estados soberanos como el Imperio romano, el Imperio romano de Oriente, el Imperio latino y el Imperio otomano hasta 1923. Con el final de la I Guerra Mundial y la derrota del Imperio otomano, el territorio europeo otomano quedó reducido a unas decenas de kilómetros en torno a Estambul. El 13 de octubre de 1923,[2] antes de la promulgación del estado turco sucesor, la República de Turquía, el parlamento turco legalizó la capitalidad a Ankara.
Las zonas históricas de Estambul fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1985, por sus importantes monumentos y restos históricos.[3]

Atenas

es la capital de Grecia y actualmente la ciudad más grande del país. La población del municipio de Atenas es de 664.046 (en 2011), pero su área metropolitana es mucho mayor y comprende una población de 3,8 millones (en 2011). Es el centro principal de la vida económica, cultural y política griega.
La historia de Atenas se extiende más de 3000 años, lo que la convierte en una de las ciudades habitadas más antiguas. Durante la época clásica de Grecia, fue una poderosa ciudad estado que surgió junto con el desarrollo de la navegación marítima del puerto de El Pireo y que tuvo un papel fundamental en el desarrollo de la democracia. También fue un centro cultural donde vivieron muchos de los grandes artistas, escritores y filósofos de la Antigüedad. Estas contribuciones de Atenas al pensamiento de su época tuvieron una gran influencia en el desarrollo de Grecia, de Roma y de la cultura occidental.
Atenas es una ciudad rica en restos arqueológicos de extraordinaria importancia, de los cuales el más famoso es el Partenón en la Acrópolis. Además de construcciones de la época clásica griega, también se conservan monumentos romanos y bizantinos,
así como varias construcciones modernas notables

Praga

es la capital de la República Checa, tal y como recoge la Constitución del país.[1] Antes fue capital del Reino de Bohemia y de Checoslovaquia. También es la capital de la región de Bohemia.
Situada a orillas del río Moldava, tiene aproximadamente 1,2 millones de habitantes, lo que la convierte en la ciudad más poblada del país. El área metropolitana de Praga cuenta con una población de 1,9 millones de habitantes.[2]
Desde 1992 el casco histórico de la ciudad es Patrimonio de la Humanidad.[3] [4] Su belleza y patrimonio histórico la convierten en una de las veinte ciudades más visitadas del mundo.[5]
Praga se ha desarrollado desde el siglo IX, convirtiéndose en una de las capitales más importantes de Europa en los siglos XVIII y XIX. Sin embargo, en el siglo XX sufrió las dos guerras mundiales y, principalmente, la dictadura nazi. Tras la segunda guerra, quedó dentro de la esfera de influencia soviética. Tras la Revolución de terciopelo y la caída del Muro de Berlín la ciudad se ha ido adaptando a la economía de mercado.
Por sus características Praga es considerada como una ciudad global de «clase Beta+», a la altura de Roma, Atenas o Berlín

Budapest

es la capital y ciudad más poblada de Hungría,[3] así como su principal centro industrial, comercial y de transportes.[4] La ciudad posee 1,74 millones de habitantes (2011),[5] una disminución significativa respecto de los casi 2,1 millones con que contaba a mediados de los años 1980,[6] que representan un quinto de la población total de Hungría. Es la ciudad más poblada de Europa central-oriental y la séptima de la Unión Europea. La ciudad ocupa una superficie de 525 km²[7] y su área metropolitana cuenta con una población de 2,38 millones de habitantes. Budapest se convirtió en una única ciudad cuando ocupó las dos orillas del río Danubio, unificando las ciudades de Buda y Óbuda, en la orilla oeste, con Pest, en la orilla este, el 17 de noviembre de 1873.[7] [8]
La historia de Budapest comenzó con Aquincum, originalmente un asentamiento celta[9] [10] que se convirtió en la capital romana de Panonia Inferior.[9] Los húngaros llegaron al territorio en el siglo IX.[11] Su primer asentamiento fue saqueado por los mongoles en 1241-42.[12] La ciudad restablecida se convirtió en uno de los centros de la cultura del Renacimiento humanista en el siglo XV.[13] [14] Después de la Batalla de Mohács y tras casi 150 años de dominio otomano,[15] el desarrollo de la región entró en una nueva era de prosperidad en los siglos XVIII y XIX, y Budapest se convirtió en una ciudad global después de la unificación de 1873.[16] También se convirtió en la segunda capital de Austria-Hungría, una gran potencia que se disolvió en 1918. Budapest fue el punto focal de la revolución húngara de 1848, la República Soviética Húngara de 1919, la Operación Panzerfaust en 1944, la batalla de Budapest de 1945 y la Revolución de 1956.
Considerada como una de las ciudades más bellas de Europa,[3] [17] [18] Budapest cuenta con varios sitios que son Patrimonio de la Humanidad, entre los que se incluyen, a orillas del Danubio, el barrio del Castillo de Buda, la avenida Andrássy, la Plaza de los Héroes y el Metropolitano del Milenio, el segundo más antiguo del mundo.[17] [19] Otros puntos destacados incluyen un total de 80 manantiales geotérmicos,[20] el mayor sistema de cuevas de aguas termales del mundo,[21] la segunda sinagoga más grande y el tercer edificio del Parlamento más grande del mundo. La ciudad atrae a alrededor de 4,3 millones de turistas al año, convirtiéndola en la 25.ª ciudad más popular del mundo, según Euromonitor.[22]
Budapest es, también, un importante centro financiero de Europa Central. La ciudad se situó tercera (de un total de 65 ciudades) en el Índice de Mercados Emergentes elaborado por Mastercard,[23] y clasificada como la ciudad mejor habitable de Europa Central y Europa del Este por índice de calidad de vida según Economist Intelligence Unit.[24] [25] También se clasificó como el "séptimo lugar idílico de Europa para vivir" por la revista Forbes,[26] y como la novena ciudad más bella del mundo por [27] Es, también, la mejor ciudad de Europa Central y del Este en el índice Innovation Cities' Top 100.[28] [29]
UCityGuides.